No rechazaré jamás un corazón que se humilla
- Published in Es la hora de la Divina Misericordia
"He abierto para ti una fuente de misericordia. Ven y toma de las gracias de esta fuente con el recipiente de la confianza. No rechazaré jamás un corazón que se humilla, tu miseria será hundida en el abismo de mi misericordia" (Diario de Santa Faustina Kowalska, nº 1485).