10 minutos con Jesús: Atrévete a rezar
- Sección: Meditaciones-homilías
- Categoría: 10 minutos con Jesús
«Invitar a Jesús que hable es arriesgado, porque te va a contestar...».
«Invitar a Jesús que hable es arriesgado, porque te va a contestar...».
«Sabio es el que mira más lejos, más profundo».
«Pero, si yo echo los demonios con el poder de Belzebú, vuestros hijos, ¿por arte de quién los echan? Por eso, ellos mismos serán vuestros jueces. Pero, si yo echo los demonios con el dedo de Dios, entonces es que el reino de Dios ha llegado a vosotros».
«Buscar el recogimiento interior».
«Si vosotros, pues, que sois malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¿cuánto más el Padre del cielo dará el Espíritu Santo a los que le piden?».
«Si nosotros, que somos malos, sabemos dar cosas buenas a nuestros hijos... ».
«Sigue llamando, Él siempre responde a nuestra oración».
«Cuando oréis, decid: “Padre, santificado sea tu nombre, venga tu reino, danos cada día nuestro pan cotidiano, perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todo el que nos debe, y no nos dejes caer en tentación”».
«Hazme, Señor, pobre de espíritu».
«Amar a Dios y servir a la iglesia desde tu propio trabajo».
«Marta, Marta, andas inquieta y preocupada con muchas cosas; solo una es necesaria. María, pues, ha escogido la parte mejor, y no le será quitada».
«Qué huella deja una persona cuando vive junto a ti.».
«Quien a vosotros escucha, a mí me escucha; quien a vosotros rechaza, a mí me rechaza; y quien me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado».
« Ellos nos guían y ayudan a caminar, a superar tentaciones, a renovar nuestro Sí a Dios».
« ¡Así de cerca quiero estar! A tope de cobertura ».
«Señor, ¿quieres que digamos que baje fuego del cielo que acabe con ellos?».
«Piques, rencillas... ¿Por qué reaccionamos así? ¿Por qué no irradio el aroma de Cristo?».
«¿Es Dios indiferente a mi dolor?».
«Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y se lo hemos querido impedir, porque no viene con nosotros».
«Olvidarme de mí para pedir por el resto».
Gracias a la generosidad de nuestros bienhechores, hemos podido seguir hasta ahora. Pero las exigencias van siempre en aumento y con frecuencia surgen gastos imprevistos, como reparaciones, adquisición de nuevas máquinas, etc.
Más información aquí.



